La ilusión de casarse no puede describirse con palabras… ¡hay que vivirlo!
Cada uno lo interpreta y lo vive a su manera y yo des del día en que mi chico me lo pidió, tenía una máxima en mi mente: vivir la experiencia con las personas que más quiero. Para mí, celebrar la boda es como una fiesta, “la fiesta del amor”, por cursi que suene. Y no sólo del amor en pareja (que hay mucho!), si no el amor a la familia y a los amigos, y no podía tener una excusa mejor para poder gritar alto y claro cuánto les quiero y lo afortunada que me siento de tenerles.
Estoy viviendo momentos mágicos con mi familia: la prueba de vestido, los pendientes, la pedida, la prueba de menú, la elección del lugar (bueno esto lo tenia claro), … todo! Y hace algún tiempo, cuando vi los brunch de Can Ribas en Instagram vi la oportunidad perfecta de vivir un momento especial con mis mejores amigas, que al fin y al cabo son como familia para mí. Era una forma de decirles, “Soy feliz y me siento muy afortunada. Por eso quiero celebrarlo y tener un recuerdo especial con vosotras, mis amigas del alma”.
Ver la ilusión que les hizo cuando se lo conté ya era como un regalo de boda. Pero cuando llegamos y vimos todo tan bien preparado, tan mono, la fruta, la mesa, todo! y escuche los gritos de emoción de mis amigas supe que ya lo había conseguido, tener mi fiesta del amor con mis niñas y un recuerdo compartido para toda la vida. Sin duda, si me volviera a casar (que espero que no!) lo repetiría, porque al final la vida es eso, ilusión y hacer de cada experiencia un recuerdo único. Y de eso, Can Ribas saben un rato… Y se nota en cada paso que hacemos hacia el gran día, todo es perfecto.
GRACIAS !
Fotos: Alphelia
Gracias a ti Alexandra por tus maravillosas y entrañables palabras.